Hemos estado buscando sobre el origen del Nail Art y existen varias versiones. Unas dicen que se inició en la India hace 5.000 años, otros opinan que fue en Egipto en el año 5.000 A.C. Queremos compartir con ustedes algunos extractos de artículos encontrados en la Web.
En el enlace http://pulsociudadano.com/2012/09/arte-en-unas-su-historia-y-como-se-esparcio-por-todo-mexico/, encontramos que todo comenzó en la India hace alrededor de 5000 años cuando las mujeres empezaron adquirir la costumbre de pintarse la punta de las uñas de color blanco con henna. Es el primer antecedente del arte en uñas.
Posteriormente en China se inventó el primer barniz de uñas como tal con una combinación de flores y gomas. Siglos después, también en China, se empezaron a poner “adornos” en las uñas aparte del esmalte. Dichos adornos eran unos “conos” que se colocaban en la punta de los dedos.
En el siglo 15 los Incas esparcieron esa moda cuando empezaron a dibujarse hasta paisajes enteros en las uñas.
Alrededor de los años 20s del siglo XX las bailarinas de cabarets empezaron a pintarse las uñas color rojo intenso, gracias a eso la moda se extendió por toda Europa y posteriormente por América. 10 años después Revlon sacaría a la venta el primer esmalte comercial y el la misma década empezarían a usarse las extensiones de uñas, curiosamente inventadas por un dentista.
Las uñas o el arte en uñas empezó a tomar la forma que conocemos hoy en día con la entrada del siglo XXI.
La versión que encontramos en el enlace http://www.bleucoast.com/la-moda-del-nail-art.html dicen que el origen del Nail Art se remonta a épocas anteriores que abordan hasta sociedades anteriores a Cristo. Los egipcios ya pintaban sus uñas en l año 5000 a. C., pero la singularidad era el significado social que llevaba asignada esta práctica, pues identificaba los estratos sociales a los que se pertenecía: los nobles y ricos lucían manicuras oscuras, mientras que los tonos claros eran para las clases bajas.
Esto también se aplicaba en la sociedad china del año 3.000 a.C., quienes decoraban sus uñas con una mezcla a base de goma arábiga, clara de huevo, cera de abeja y gelatina que, a veces, incluía pétalos de rosa molidos, orquídeas y otras plantas. Los colores vistosos, al igual que sucediera en Egipto, estaban destinados a las clases altas, mientras que a las bajas les correspondían colores neutros. Las uñas largas de la nobleza británica del siglo XVII tomaron el relevo de esta forma de distinción social, pero la llegada de la edad media rompió el dinamismo de la estética al asociar la cosmética con el diablo, aunque eso no significó que las mujeres dejaran de preocuparse por su aspecto y mantuvieran su apego a la cosmética.
Lo cierto que es que el Mail Art tal como lo conocemos hoy día se originó en la década de los ‘90 con las idols japonesas que popularizaron el Nail Art, una tendencia que consiste en decorarse las uñas hasta puntos tan extremos que parecen verdaderas obras de arte. El Nail Art tiene muy poco que ver con la manicura francesa, ya que estamos hablando de uñas realizadas con material acrílico a las que incluso se le decoran con figuras en 3D, cristales o incluso joyas.
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